Este no es un blog de consejos.
Es un espacio para decir lo que no se dice, para nombrar lo que se calla, para mirar el cuerpo femenino con profundidad, respeto y claridad.
Aquí comparto artículos que nacen de mi experiencia acompañando mujeres, de lo que he visto, sentido y aprendido con cada una de ellas y de sus historias.
No escribo para convencer, sino para abrirnos al cuestionamiento.
Para que cada mujer pueda conocerse y cuestionar lo que le han contado. 

Para que cada mujer pueda tomar decisiones sobre su salud desde la información y no desde el miedo.

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Porque el cuerpo de mujer es un universo completo —territorio, historia, energía, emoción, sabiduría, memoria y raíz— que no se divide ni fragmenta.
Es una biografía viva, un espacio que no se puede reducir ni diseccionar.
Es un universo por descubrir, por conocer, por habitar, por sanar.